Fue un día sábado el cual yo muy apenado de la partida al cielo de mi última mascota, mi abuelita vivía con nosotros, entonces ese día ella decidió salir a caminar y llego con una perrita en brazos y simplemente nos la puso en la cama y nos contó la historia de la perrita. Dijo que la había encontrado en la basura comiendo y nosotros al revisar a la perrita nos dimos cuenta de que estaba en pésimo estado casi no poseía dientes y el veterinario nos dijo que eso podría haberse causado por que le pegaban con algo duro, tenía sus tetitas caídas y era muy nerviosa en ese día fuimos al veterinario a vacunarla y todo y hasta la actualidad ella sigue gracias a Dios con nosotros con mejor aspecto.